Entrevista al escultor Roberto Antonio Perea quien dedica su creatividad a las obras en madera, cerámica y escultura cuyos temas abstractos y espirituales conmueven los sentidos al contemplarlos.
Perea recibió a Caminos Culturales en su casa taller del barrio de Flores, en la ciudad de Buenos Aires donde descubrimos, entre tantos otros trabajos, el impactante símbolo de los peregrinos que llegan a Santiago de Compostela. “Buen Camino”, nació de la observación del artista a quienes llegaban a pie o en bicicleta, exhaustos pero felices a la Plaza del Obradoiro, luciendo entre sus ropas el emblema del Camino: la Concha del Peregrino. Precisamente, fue José Luis Álvarez, Administrador del sitio web de la Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago, quien publicó una reseña sobre la exposición de su obra en el Centro Burgalés de Buenos Aires, que motivó otras obras que contaremos en esta historia…
¿Cuál fue el proceso de construcción de “Buen Camino”?
Visité en varias oportunidades Santiago de Compostela: me emocionó comprobar la alegría con la cual los grupos de peregrinos a la Plaza del Obradoiro: lo hacían hermanados y aún, en diferentes idiomas y culturas, entendían el lenguaje de la unión en cantos y sonrisas. Me pregunté: ¿Que los vincula…? La respuesta llegó rápidamente: los unía el Camino de Santiago. Al regresar a Bs. As. puse manos a la obra y nació Buen Camino, que representaba a la Concha del Peregrino. El Centro Burgalés en Buenos Aires, nos abrió sus puertas para exponerlo y quise seguir con la misma idea. En esta línea de investigación, encontré material interesante: descubrí lo que se llama la Iglesia de Piedra que, seguramente fue un albergue en la época del prerrománico. Algunos textos informan que caminantes de Alemania llegaban a esas tierras.
¿Qué espacio de la iglesia lo cautivó?
Me impactó un detalle que se observa en la parte exterior trasera del templo, ábside, que es el cobijo de la mesa del altar. Se trata de un rectángulo que enmarca una hermosa ventana prerrománica: sobre ella hay una abertura con cuatro columnas propias de la arquitectura hispano-morisca: en el ascenso de ese plano nos encontramos con un texto en latín donde los constructores dejaron en el 1600 un testimonio de la remota antigüedad del templo. Ubico a la ventana, en primer término, porque es la protagonista de esta historia;
¿Qué valioso testimonio nos dejan las piedras antiguas de la ventana?
Son el testimonio de su esencia: debajo de la escritura en latín y de la abertura ornamentada por las columnas que se llaman “arco de herradura”, muy característico de la arquitectura eclesiástica. En el predio, se encontraba uno de los cementerios más pequeños de Galicia que hoy está abandonado. Aún así, entre los restos se encuentra esta maravilla que los antiguos destacaron y que me impresionó de tal manera que trate de interpretarla en una obra.
¿Adónde se encuentra y por qué está abandonado?
El primitivo camino de Santiago debe estar a 300 metros y cercano a Lugo. Si bien fue turístico hoy ya no lo es porque hay un cartel moderno de la Xunta de Galicia. Por lo que he averiguado, la comunidad querría que se ponga en valor: es precioso y tiene una vegetación longeva de árboles de unos 200 y 300 años.
¿Como elaboró el trabajo que nos muestra lo que usted descubrió?
Quise brindar un testimonio de tanta antigüedad, recuadrado y destacado en un lugar abandonado: se nota la presencia de la ventana de la Iglesia de Piedra que parece llamarnos y que guarda una magia especial. Los mismos creyentes de esa época tenían una emoción particular. Si leemos el texto del cartel comprendemos el mensaje que nos dejaron y que hoy si cerramos los ojos, escuchamos: son las voces de quienes cantaban en los coros y rezaban los que atraviesan las columnas llamándonos. Quisiera volver a Galicia y estar allí.
¿Qué dice el cartel?
“Para los visitantes: señalización en la que se hace referencia a la iglesia de San Salvador de Soutomerille y los comentarios a la importancia de este lugar. Es el cartel para los visitantes.
¿Cuánto tiempo le llevó terminar la escultura?
Tardé un mes en concluir la obra aunque antes hice otra. La primera fue en arcilla: la modelé y luego hice un molde de yeso; después lo vacié y llené con cemento. Lo derramé y puse hierro; por eso su peso está arriba de los 7 kilos porque es cemento con hierro. En un principio pensé que iba a ser muy difícil de exponer y, por este motivo, hice otra muy similar para colgar con materiales más livianos: aquí utilicé poliuretanos y una capa de cemento muy liviana. Esta debe pesar dos kilos y puede mirarse de frente. La hice con la idea de regalarsela a la presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago en la Argentina, Rosana Montano quien estuvo en la presentación de Buen Camino y ponderó mi obra.
Al contemplarla, siento que nos abre su puerta de entrada nos da una bienvenida y la salida nos abre otra posibilidad…La imagino así.
¡Es perfecto! La ventana pretende que escuchemos los cantos de la gente acogiéndonos.
No es una obra que deprima. Si bien es antigua nos brinda alegría. Me da paz y me invita a salir cuando quiera.
¿Qué siente cuando termina una obra y especialmente aquellas que lo conectan con Galicia un lugar que tanto ama?
Tengo muchas obras que son espirituales con la cual tengo conexión permanente pero las abstractas también comunican. Los materiales se expresan como quieren (ya que al no ser yo un escultor) me asocio con los materiales que me conducen. Este concepto se arrima a otra respuesta y digo: acá hay una mano que no es la mía. Acá hay una mano superior: gracias, Señor, porque la inspiración fue hacia otro lugar que es el que me señalaste.
¿Es una mano espiritual la que lo acompaña para señalar una época, un lugar de encuentro donde las voces se encontraban?
Si. La obra sin historia es un interrogante: ¿que quiso hacer este hombre? Las obras necesitan un contexto. Necesita hablar, que se vea que, aunque esté todo derrumbado, sigue presente y encuadrada: es como un renacer. Es como si se hubiese construido ayer y nos transmite la frescura de la vida. Esta obra quiere ser comprendida y, de este modo, el saludo de los reconstructores que en latín escriben su testimonio nos hace entender que deben haberse emocionado al descubrir la piedra y la ventana y así las honraron con su trabajo.
¿Le gustaría verla reconstruida y que su obra forme parte de esta reconstrucción?
Creo que estamos llamando a que la gente se adhiera para defender el lugar. No digo que la reconstruyan, sino que se cuide un poco más. Que se invite a los caminantes a ver esta Iglesia de piedra con su testimonio y con su mensaje.
¿Qué mensaje en el aprendizaje de la creación, le ha dejado la Iglesia de Piedra?
Esperanza, resguardo como el que sentimos cuando nos encontramos en el interior de un templo, que también es el interior de nuestro ser. Siento cobijo y calidez espiritual.
Entiendo que un escultor es un creador que no tiene límites porque el límite es su propia creación. ¿Como se presentarías en esta entrevista?
Esta obra me saca de la creatividad propiamente dicha. Encierra un mensaje tan hermético que casi no puedo intervenir. La única inspiración que puedo mencionar es la de haberla copiado lo más fielmente que he podido para que siga hablando por sí misma. Además, me animo a manifestar un pedido: no me desvíes Señor: quiero transmitir lo que me indica su inmanencia; copiarla y brindarla a quienes quieran contemplarla. No es la creación de un escultor. Es del Señor…
Patricia Ortiz
Corrección: Ricardo de Titto
Crédito fotográfico: Caminos Culturales
Felicitaciones , Roberto . Hermosa obra , como todo lo que haces y lleva tu impronta , tan profunda y espiritual .Buen camino , dicen los peregrinos , yo añado , buena vida , Roberto y a seguir expresandote a traves de tu arte .
Excelente y hermosa obra!!! Felicitaciones a Roberto Perea
agradezco a Caminos Culturales especialmente a Patricia Ortiz que tuvo a su cargo las tareas para hacer posible esta maravillosa publicación y a todas las personas que intervinieron en la misma y que no tuve el placer de conocer, mi saludo mas afectuoso.
Excelente obra Roberto, lograste materializar una pieza divina desde tu interior.
Muchas gracias Alejandro por tus palabras
Gran escultor Roberto Perea y excelente persona. Sus obras tienen una delicadeza y al mismo tiempo una fuerza inusitadas.
Hermosa nota la realizada al escultor Roberto Perea, observar la creatividad para elegir materiales livianos, y la gran sensibilidad espiritual que se reflejan en su obra. O cuando nos participa de sus sentimientos sobre la Iglesia de piedra donde dice «que se asemeja lo que encontramos en el interior de un templo a lo que sucede en nuestro propio interior, cobijo, paz interior, esperanza y calidez espiritual» gracias
Muy linda nota al escultor Roberto Perea, su creatividad para elegir los materiales livianos y la belleza de su obra con una gran sensibilidad espiritual. «El interior del templo es el interior de nuestro ser, porque nos transporta a una paz espiritual que nos da esperanza, cobija y nos eleva» Gracias
La obra del escultor Roberto Perea nos guía por un viaje de exquisita sensibilidad y profunda contrición. La imagen de esa iglesia perdida en el tiempo pero aún vigente gracias a una mirada amorosa y piadosa, nos habla de lo infinito contenido en un momento ínfimo. La memoria es la historia relatada y compartida.
Hermoso lo que hacés y las historias que guardan cada una de tus obras! Felicitaciones Abu!
Patricia,
Muy buen artículo!
Agradecemo al escultor Roberto Antonio Perea por sus obras dedicadas al Camino de Santiago y muy especialmente por el hermoso gesto de regalar la obra a la presidente de la Asociación Amigos del Camino de Santiago en Argentina, Rosana Montano.