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El Premio Internacional Navarro, un impulso a la historia, al recuerdo de personalidades importantes que construyeron la historia y la cultura italiana

Enzo Randazzo, el escritor siciliano, nacido en Sambuca, -Italia-, presenta el Premio Internacional Navarro, dirigido a los escritores y escritoras del mundo; es un mpulso a la historia y al recuerdo de personalidades importantes que construyeron la historia y la cultura italiana.

Enzo Randazzo, el escritor siciliano, nacido en Sambuca, -Italia-, presenta el Premio Internacional Navarro,  dirigido a los escritores y escritoras del mundo:

Queridísimos amigos y amigas italianos y argentinos: esta noche quiero hablarles prevalentemente del Premio Internacional Navarro, que es un premio literario dirigido a muchos jóvenes, a estudiantes, pero no solo a ellos, sino a todos los escritores y las escritoras del mundo, porque justamente es de carácter internacional, y que tiene como objetivo valorizar dos grandes personalidades: Vincenzo Navarro y Emanuele Navarro Della Miraglia, que dominaron en el siglo XIX la cultura siciliana,  y en parte la cultura italiana en general. especialmente Emanuele, por sus relaciones, el hecho de vivir junto a otros intelectuales europeos en la gran metrópolis de parís, y luego en Milán, adquirió un espíritu, una mentalidad europea, y pudo transmitir impulsos innovativos a la escritura y a la literatura italiana, siendo considerado como aquel que llevó el verismo a Italia. Vivió en Francia por 15 años, en un periodo en el cual hubo grandes modificaciones: había llegado a su fin la corriente del idealismo, nacía una diferente concepción de la literatura, la izquierda hegeliana prevalecía en el campo filosófico y sucesivamente el positivismo impuso sus leyes. Este cambio en el campo filosófico se reflejó en el campo literario y fue así como la cultura francesa se insertó en el ámbito de la cultura realista europea con el naturalismo. Emanuele Navarro Della Miraglia frecuentó estos salones literarios parisinos, pero también el ambiente transgresor y rebelde de los impresionistas, en la colina de Montmartre, en el Moulin Rouge, es decir, un ambiente de jóvenes, de espíritu nuevo, creativo. Luego de estos quince años regresó a Milán y creó en el ámbito de dicha ciudad otro cenáculo cultural, otro ambiente cultural, frecuentando los salones de Teresa Kramer, el “Caffè Biffi”, junto con (Giovanni) verga y (Luigi) capuana a  quienes sugerirá este nuevo modo diferente de escribir y de hacer “verismo”.

Navarro será también promotor (en “la crónica bizantina”, “il fanfulla” y “la fronda”*) de un cenáculo periodístico – literario, publicando escritos de Verga y Capuana en sus inicios, las primeras novelas de Pirandello e inclusive algunos cuentos de (Gabriele) d’annunzio.

Por lo tanto, el Premio Navarro es un momento importante para recordar a estos escritores, pero al mismo tiempo de hacer amar a los jóvenes la cultura. De hecho hay dos secciones -que este año son tres- abiertas a ellos: una para la poesía, otra para la prosa, y la tercera para lo relacionado con el archivo de estado, cuyos escritos y documentos pueden ser consultados por los estudiantes de secundaria, y servir como estímulo para la creatividad, para producir cuentos innovativos. Los escritores más maduros podrán participar en cambio en las secciones referidas a la poesía y a la narrativa, editada e inédita, sea en las formas de cuento breve o cuento largo. Además, otra sección comprende el teatro y otra los ensayos. Como pueden ver, alrededor de este Premio Navarro se crea un vasto movimiento literario y cultural, transformándose en un escenario de intercambio para tantos intelectuales italianos y europeos. Nosotros nos dedicamos por un año a este premio, porque durante un año lo anunciamos, lo publicamos, hacemos diferentes manifestaciones -como esta mía, de esta noche-, con la invitación a participar, con plena libertad creativa, sin limitaciones, sin tener detrás entes económicos o editoriales que nos condicionen. El premio navarro llegó a la XIV edición y junto a este premio hay un convenio de estudios navarrianos sobre la personalidad de Vincenzo Navarro (padre de Emanuele). Nacido en ribera (Sicilia), fue un poeta de carácter iluminista y arcádico prevalentemente, de ideales fuertemente patrióticos, en una época en la cual liberales, carbonarios y masones que se habían revelado al gobierno de los extranjeros, construyeron el resurgimiento italiano*. en particular Sambuca di Sicilia* -que es mi pueblo- fue un protagonista de esa página de historia. Como se recuerda en un film reciente que se llama “L’Abbaglio”, de (Salvo) Ficarra y (Valentino) Picone, dos actores muy famosos actualmente en Italia, aquí llegó la “columna Orsini”, una misión orquestada por Garibaldi para distraer a los Borbones: una reducida patrulla de soldados fue mandada hacia el interior, los borbones cayeron en la trampa de esta maniobra de distracción, dejaron a Palermo desprotegida y así Sicilia se rebeló al gobierno opresor representado por los Borbones. Nosotros con el Premio Navarro, damos impulso a la historia, al recuerdo de personalidades importantes que construyeron la historia y que construyeron la cultura italiana. De hecho, el más famoso de los escritos de Emanuele Navarro es “La Nana”, y en él se narra la historia de una pueblerina -Rosaria Passalacqua- seducida por un noble vanidoso que la abandona. Pero Emanuele Navarro, marcado por el espíritu europeo, en lugar de recurrir a un duelo final como hizo su amigo Verga en “Cavalleria Rusticana” *, desmitificó este concepto de los celos sicilianos y dejó abierta la puerta al diálogo y al perdón. Así, un campesino que había cortejado a Rosaria pero que no había sido correspondido, la perdona, la abraza, y vivirán juntos reconstruyendo la dignidad y el honor de la muchacha. “La Nana” es una novela modernista, la primera contra el feminicidio. Emanuel Navarro derriba el mito de la posesión celosa de los sicilianos también en sus cuentos breves; por ejemplo en “filosofía conyugal”: un hombre mayor (Francesco llsanti) casado con una mujer joven (Carmelina) que tenía como amante un médico refinado, cuando este amante se queja de que a su vez es traicionado por la mujer con otro amante más joven, el marido lo insta a tolerar la infidelidad (“total, fue una sola vez”). En esta manera Navarro no solo se anticipa al verismo, sino también en alguna manera al Pirandellismo, con personajes como Ciampa * que reducirán el concepto del honor a la relación entre “el parecer” y “el ser” (así, a Ciampa no le importa cuál sea la verdad, sino que los demás no sepan que él sabe que la mujer lo está traicionando, ya que si así fuera él tendría que reaccionar y provocar prácticamente un estrago).

El Premio Internacional Navarro, un impulso a la historia, al recuerdo de personalidades importantes que construyeron la historia y la cultura italiana.

De modo que este Premio Navarro es también una ocasión para lanzar una idea de modernidad a la cultura siciliana, una idea de internacionalidad, de respeto, de libertad, de amor y tolerancia que la cultura puede brindar.

Yo debo decir que en Argentina -junto con Patricia Ortiz, periodista argentina que me estimula a seguir en este recorrido y que en ciertos aspectos colabora y me guía-, en ocasión de esta responsabilidad, de este honor que me fue ofrecido de representar a los escritores italianos en la semana de la Lengua Italiana en el mundo, tuve la oportunidad de conocer y dialogar con sicilianos, calabreses, lombardos, de primera, segunda, tercera generación. Ellos me hicieron ver la fuerza de la cohesión de la cultura italiana; la capacidad de ser modernos, tolerantes, abiertos a lo nuevo, de insertarse y adaptarse a la complejidad del mundo, a la cultura con la cual están en contacto en el país que los hospeda, pero manteniendo fortísima la propia identidad, los propios valores positivos, la sociabilidad, la interculturalidad. Esos son elementos básicos, fundacionales de la cultura siciliana, de la cultura italiana, que de la cultura y civilización griega hizo la sustancia de sus orígenes, y no sólo, sino también de las culturas árabe, normanda, española. Es decir que esta isla -Sicilia- puesta en el medio del mediterráneo, tuvo la capacidad de hacerse “puente de paz”, de síntesis, de encuentro positivo. hoy el mundo tiene necesidad de esta realidad, y ciertamente una relación estrecha entre los italianos de Italia y los italianos de Argentina es beneficiosa para ambas partes. Y por eso yo esta noche quiero abrazar a todos los hermanos que conocí y aprecié en Argentina, sean hombres, mujeres, ancianos, jóvenes, niños, porque tuvieron la capacidad de hablar al mundo en el lenguaje necesario de la coexistencia intelectual, de la libertad y de la tolerancia. los premios literarios como el Navarro, que no dan dinero, que quizás no dan tampoco gloria; dan sin embargo fuerza a la voz de la poesía, a la voz de la literatura, y a estos valores humanos, positivos, profundos, que desde Homero y Virgilio a Dante, se transmiten en el mundo a través de la difusión, no solo de nuestra poesía, sino también de nuestro arte, de nuestra pintura, de los que Patricia por ejemplo da testimonio y es portadora en el mundo. Pienso que nosotros debemos siempre aspirar a la fuerza impulsora de estos valores y tener la esperanza de que cada vez más el ser humano se nutra no sólo de pan, no solo de alimentos, sino de humanidad, de valores profundos, internacionales, como solo la cultura puede ofrecer. Debo decirles que yo realizo este esfuerzo no solo a través de la relación con la cultura italiana en el mundo, sino que cotidianamente, presento a los jóvenes el Premio Navarro en las escuelas y universidades haciendo que tantos estudiantes se puedan acercar a la cultura sin considerarla como una cosa “rancia”, para eruditos, sino como algo vivo que llegue a sus conciencias, a su sensibilidad, y sobre todo que dé perspectivas y esperanza. Creo que si muchos miembros de la clase dirigente analizaran la realidad con menor pragmatismo y con más sentido de valores e ideales, seguramente los sueños de la humanidad podrían realizarse mejor. Y nosotros que pensamos y creemos en hacer cultura como compromiso, como sacrificio, pero también como creación y alegría, seguiremos expresándonos en todas las formas posibles; en todas las formas que la historia de la humanidad ha conocido, tratando de profundizarlas, de llevarlas adelante y de hacerlas cada vez más vivas y actuales.

El Premio Internacional Navarro, un impulso a la historia, al recuerdo de personalidades importantes que construyeron la historia y la cultura italiana.

·        “La Cronaca Bizantina”“Il Fanfulla della Domenica” y “La Fronda” eran publicaciones (dos diarios y una revista) de carácter literario.

·        Resurgimiento italiano: se llama así a los sucesos culturales, políticos, militares, sociales, etc. que llevaron al nacimiento de un estado italiano independiente, en la segunda mitad del siglo XIX.

·        Sambuca di Sicilia: Pueblo en la provincia de Agrigento, Sicilia, que cuenta con aproximadamente 6000 habitantes; fue proclamado “Borgo dei Borghi”, el pueblo más lindo de Italia, en la edición del año 2016.

·        “Cavalleria rusticana”: cuento de Giovanni Verga, sobre el que se basa la famosa Ópera lírica homónima del compositor Pietro Mascagni, obra maestra del verismo italiano.

·        Ciampa: Personaje de la obra “Il berretto a sonagli” (en español “El gorro de cascabeles”), de Luigi Pirandello.

Patricia Ortiz 
Crédito fotográfico: Franco Lo Vecchio 
Agradecimiento a la profesora Ada Nazzaro 

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