El “Tren a las Nubes” es una de las atracciones turísticas más importantes de nuestro país, reconocido a nivel mundial como el tercer tren más elevado en funcionamiento. Raúl Yasinovsky, fotógrafo profesional y socio fundador de Coberturas Gráficas Periodísticas en Imágenes Continental, fue invitado especialmente por el funcionario Carmelo Russo, Presidente de “Tren a las Nubes”, para participar y fotografiar el trayecto. Y así se convirtió en nuestro testigo exclusivo de este recorrido maravilloso, por los impactantes paisajes salteños.
El inolvidable y mágico viaje en el “Tren a las Nubes”, comienza en la ciudad de Salta con la partida en autobuses de última generación. Estos vehículos están dotados con calefacción, aire acondicionado, comedor, consultorio médico, servicios audiovisuales, guías bilingües y una ambulancia equipada con insumos para primeros auxilios, incluyendo tubos de oxígeno. Minutos antes de las 7 hs, los turistas inician el recorrido por la Ruta Nacional Nº 51, atravesando las reconocidas localidades salteñas de Campo Quijano, Gobernador Solá, El Alfarcito y Santa Rosa de Tastil.
Yasinovsky, comentó detalles de las primeras horas del recorrido: “realizamos unas paradas fotográficas en el Viaducto El Toro y en la Formación Geológica Yacoraite, donde nos detuvimos unos minutos a contemplar los increíbles paisajes que nos ofrece la excursión. Posteriormente, llegamos a la localidad El Alfarcito, donde nos ofrecieron un rico desayuno de campo, incluido en el precio del ticket. El viaje continuó por la Quebrada de las Cuevas, la Llanura de Muñano, y finalmente arribamos al pueblo de San Antonio de los Cobres, donde nos subimos al “Tren de las Nubes” propiamente dicho”.
El recorrido transcurre en un escenario por demás diverso y colorido, donde la paleta de colores de la naturaleza tiñó en forma pintoresca las rústicas regiones. Abundan localidades conocidas por sus originales artesanías, museos y gastronomía autóctona. La excursión en el “Tren a las Nubes” se destaca también por ofrecer una propuesta original y selecta, elegida por los más exigentes turistas del mundo. El trayecto del tren histórico se realiza por el viaducto de La Polvorilla, hasta ascender a más de 4.220 metros sobre el nivel del mar, por un majestuoso puente metálico de más de 60 metros de altura.
Si bien el puente y el tren son grandes obras de la ingeniería del siglo pasado, iniciadas en el año 1920 por el Ingeniero Richard Fontain Maury, actualmente cumplen con los estrictos estándares de calidad y seguridad requeridos internacionalmente.
El prestigioso fotógrafo agregó que “en el tramo del circuito por carretera, pasaron por mi vista y por la lente de mi cámara, poblados humildes, cementerios que duermen entre montañas multicolores y ríos casi secos, entre otras vistas. El viaje en la locomotora comienza en San Antonio de los Cobres y, en datos, puedo decir que es un recorrido de 434 kilómetros (ida y vuelta), donde atravesamos 29 puentes, 21 túneles y 13 viaductos. Ese día, de un inconmensurable cielo celeste y esplendoroso sol, iluminó esta experiencia única. El tren está compuesto por seis coches o vagones que transportan un promedio de 400 turistas de todo el mundo. Cada coche se encuentra identificado y numerado con un color que lo destaca, para que cada pasajero pueda subir en el vagón correspondiente al idioma seleccionado para la excursión”. Y prosigue: “El Tren a las Nubes” provoca asombro y alegría, muchas emociones que se agolpan en cada momento de la travesía. No queríamos perder ningún detalle, y cada tanto nos asomábamos por las ventanillas para tomar imágenes difíciles de olvidar. Los empleados y funcionarios del “Tren a las Nubes”, cuentan con una notable organización del recorrido, muy rigurosa y detallista”.
Como consideración final de su experiencia, Yasinovsky señaló que “un momento en el cual el corazón se hincha de orgullo, es cuando cantamos el Himno Nacional Argentino, que concluye con el izamiento de la bandera en la punta del Peñasco. Son instantes de un sentimiento nacional que quedan guardados por siempre en la memoria”. Y cerró diciendo que “las nubes se despiertan y se extienden para acompañarnos. Esta obra única, que sin dudas forma parte del patrimonio ferroviario mundial, nos permite contemplar cómo la tierra y la Puna salteña se unen y funden armoniosamente”.
En Caminos Culturales creemos que “El Tren a las Nubes” es sin lugar a dudas un ícono salteño que nos invita a descubrir la majestuosa obra ferroviaria que se fusiona con la naturaleza. El viaje es una postal móvil que combina montañas, valles, pueblos históricos, shows artísticos y el componente autóctono propio de cada localidad. En cada estación, los viajeros quedarán rendidos ante el increíble espectáculo natural. ¡No se lo pierdan!
Patricia Ortiz
Corrección: Eugenia Cisneros
Crédito fotográfico: Raúl Yasinovsky