Tucumán es un oasis que ofrece a los visitantes experiencias únicas durante todo el año por su clima benévolo y por la variedad de paisajes que guarda en su geografía.
Los calurosos meses de verano son para disfrutar de sus tranquilos ríos y frescas cascadas; un remanso de quietud y solaz.
Esta rica tierra de contrastes, es, además, su fortaleza a la hora de atraer a los turistas del país y del mundo que la recorren. La magia selvática de la Yunga; la aridez majestuosa de los Valles Calchaquíes; la fertilidad de sus planicies o la imponencia de sus altitudes en el Aconquija, se descubren en tramos cortos de recorrido. Y en cada una de estas regiones, siempre presente, la bendición del agua para regocijar al turista.
En esta nota, visitaremos la majestuosidad de la Ciudad Sagrada de Quilmes, a la que se accede desde Amaicha, -en menos de media hora-.
A esta encantadora ciudad se llega por la Ruta Provincial 307 para acceder a la mítica Ruta Nacional 40 y, desde allí, por un camino enripiado y en buen estado, durante unos 5 kilómetros, se llega hasta al sitio arqueológico de Quilmes, -al pie del cerro Altos del Rey-.
El sitio arqueológico está custodiado por arbustos y algarrobales sobre un suelo de arenas blancas. El centro de interpretación tiene cinco salas imperdibles, entre las que se destaca un auditorio con pantalla gigante donde se proyecta un audiovisual en el que participaron miembros de la comunidad Amaicha y relata la historia y el presente. Además, en la segunda sala, se extienden una “línea del tiempo” que narra los hechos de la historia en el mundo y la de los calchaquíes, lo que permite conocer qué ocurría en diversos lugares mientras crecía este pueblo diaguita calchaquí, desde que llegaron los incas hasta los españoles y la actualidad.
A continuación se encuentra otro ambiente donde las audio guías acompañan al visitante y describen la forma de vida calchaquí. En otra sala se observan piezas arqueológicas de gran valor. Casi terminando el recorrido por el museo, existe otro recinto que expone el valor de la tierra y la labor comunitaria para su explotación sustentable. El final de la visita está dedicado al concepto del cosmos y de la naturaleza de la cultura andina. La Ciudad Sagrada de los Quilmes, es uno de los sitios arqueológicos más importantes del Norte argentino, que atrae visitantes de todo el mundo y convierte a la travesía en una experiencia que une pueblos, culturas e historias.
La Ciudad Sagrada de Los Quilmes se recorrer a pie o reservando este circuito de culto que nos lleva a conocer desde Amaicha, – en vehículo para cuatro o para ocho personas-, este sitio único. La importancia de los bosques de algarrobas; la presencia de los cazadores recolectores de la prehistoriadel pueblo de Incalilla, -el primer asentamiento en la zona-; los 50 años del Inca; los 300 años de resistencia calchaquí o de qué manera fue reconstruido en 1977 y luego privatizado en los años 90, para luego recuperarlo en 2008 con un sistema de manejo compartido entre la comunidad Amaicha y el estado provincial. Estos son algunos de los aspectos que se disfrutan en esta excursión inolvidable.
Fuente: Julieta Muñoz
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